Descifrando el Lenguaje de las Manos: Guía para Interpretar Gestos

En nuestra vida diaria, las manos no solo nos ayudan a realizar tareas físicas, sino que también juegan un papel fundamental en la comunicación. 

De acuerdo con los especialistas en comunicación, nuestras manos también pueden hablar. Al acompañar nuestras palabras con gestos, expresamos emociones, dividimos ideas, o ejemplificamos, entre otras cosas. Es posible interpretar los múltiples significados detrás del lenguaje de las manos. La mayoría de las veces, al hablar, utilizamos gestos con las manos y nuestro cuerpo en general. Oradores efectivos emplean sus manos para enriquecer su mensaje y generar confianza en su audiencia. En este texto, analizaremos el lenguaje de las manos, referido a los gestos que acompañan nuestras palabras. Examinaremos sus funciones más importantes y las posibles interpretaciones que estos gestos pueden tener.

El movimiento de las manos: una forma de comunicación no verbal

La comunicación no verbal es la forma en la que expresamos un mensaje sin usar palabras, a través de gestos, señales o indicios. Dentro de esta forma de comunicación, encontramos cuatro áreas principales. La primera es la paralingüística, que abarca el tono, ritmo, volumen y timbre de la voz. La segunda es la kinesia, que incluye la expresión facial, la mirada, la postura y el lenguaje de las manos. Luego está la proxemia, que se refiere al uso del espacio personal, y finalmente la imagen personal, que tiene que ver con nuestro estilo y forma de vestir. Según estudios, el 93 % de la comunicación es no verbal, mientras que solo el 7 % se relaciona con el lenguaje verbal. Esto quiere decir que la mayoría de nuestra comunicación se da a través de gestos y expresiones corporales, incluyendo el lenguaje de las manos. Ahora, ¿cómo podemos interpretar estos gestos? voy a mostrar algunos ejemplos para entenderlo mejor.

¿Cómo colaboran las manos en la transmisión del mensaje?

El uso de gestos con las manos es esencial para enriquecer la comunicación. Tanto políticos como presentadores y actores recurren a este recurso para destacar aspectos importantes de su mensaje. Los gestos manuales no son aleatorios, sino que llevan consigo un significado y propósito específico. Los expertos pueden interpretar estos gestos y entender su relevancia en la comunicación.

  • Cuando mostramos nuestras manos al hablar, estamos reforzando nuestro mensaje. La exposición de las manos genera confianza, mientras que esconderlas disminuye la sensación de honestidad. La transparencia se refleja al mostrar las manos, mientras que su ocultamiento puede indicar una falta de sinceridad.
  • Mostrar el puño cerrado podría indicar falta de disposición a negociar. Apuntar con el dedo y cerrar el puño son gestos muy desagradables, parecidos a golpear simbólicamente a la persona señalada. Un puño cerrado puede ser interpretado como una señal de hostilidad.
  • Tocar nuestra cara es un gesto que puede expresar duda, inseguridad o ansiedad. Al llevar la mano a los ojos, boca, nariz o cuello, podemos estar ocultando información de manera consciente o inconsciente.
  • Poner las manos hacia abajo con los dedos rectos es un gesto que transmite autoridad a los que escuchan. También denota desafío o control. Por lo tanto, si alguien hace este gesto al hablar, podría significar que no está dispuesto a ceder.
  • Poner las manos en la espalda suele denotar confianza en uno mismo y anticipación por algo.
  • Mover las manos cuando hablas se hace para enfatizar el mensaje. Usualmente indica autoridad y a menudo señala una decisión firme por parte del hablante.
  • Cuando nos frotamos las manos, estamos tratando de mantener el control en situaciones incómodas o nerviosas. Este gesto nos reconforta y nos tranquiliza, recordándonos que todo estará bien. Por otro lado, cuando entrelazamos los dedos, revelamos ansiedad y frustración.
  • Colocar las manos en las caderas puede parecer agresivo, pero generalmente indica precaución. También puede transmitir autoridad, control o seguridad en la situación, como suelen hacer los militares.

Las manos tienen diferentes funciones significativas en la comunicación. Podemos señalar, acompañar, reforzar mensajes, enumerar con los dedos o dirigirnos al público, expresar emociones como enojo o dureza. Los gestos son importantes en la expresión corporal y pueden mejorar nuestros discursos si los conocemos bien. Aunque siempre es esencial considerar el contexto, existen ciertas pautas generales para interpretar lenguaje no verbal en discursos públicos.

El lenguaje de las manos es una herramienta esencial en la comunicación no verbal, proporcionando una dimensión adicional a nuestras palabras. 

Los gestos manuales pueden expresar emociones, establecer autoridad y transmitir intenciones, enriqueciendo nuestras interacciones y discursos. Al comprender cómo los movimientos de las manos reflejan estados emocionales y actitudes, podemos interpretar y usar estos gestos con mayor precisión para mejorar nuestras presentaciones y comunicaciones diarias. 

Desde la confianza que transmitimos al mostrar nuestras manos hasta los matices de control o inseguridad que revelan ciertos gestos, cada movimiento tiene un propósito y significado. Conocer y aplicar estas interpretaciones puede potenciar nuestra capacidad de conectar, persuadir y comunicar de manera efectiva.

Belén Stettler

Belén Stettler es una líder en comunicación política con una sólida formación académica y experiencia profesional. Como becaria del prestigioso programa Fulbright, participó en un programa de Política y Liderazgo Político en la Universidad de Massachusetts, donde se especializó en liderazgo y estrategias políticas. Licenciada en Ciencias de la Comunicación Social por la Universidad de Buenos Aires (UBA), con orientación en opinión pública y publicidad, Belén ha desarrollado una carrera enfocada en la comunicación estratégica. Completó una diplomatura en Comunicación Gubernamental en la Universidad Austral, destacándose en la planificación y ejecución de estrategias de comunicación para la gestión pública. Con más de una década de experiencia, ha trabajado tanto en el sector público como privado, capacitando a líderes y funcionarios en habilidades de comunicación y liderando campañas a nivel nacional, provincial y municipal.